Un domingo por la tarde o cualquier otro día de la semana, reserva un tiempo para tí. Si tienes niños, busca una persona -de tu confianza- en quien puedas delegar esta responsabilidad como mínimo, por dos horas. Este momento, será una recompensa que te dejará fresca y lista para que enfrentes los retos familiares y personales.
Emplea tiempo en leer un material, un libro que te sirva de inspiración, lee una novela, vete a ver una obra de teatro, da un paseo en bicicleta, saborea un café o un té y relájate, relájate y relájate.
Anda!! toma un libro y tu cartera y coje la calle..llégate hasta un sitio en donde haya una mesita acogedora en un rinconcito que te atrape y saborea un café. Sólo tú puedes hacerlo. La razón por la que nacistes fue para dejar una huella inborrable en el mundo. Disfruta este tiempo... Recuerda que eres un ser especial, amado, auténtico, creativo. Respeta tu individualidad, apuesta a la fé, al predón, apuesta al amor y quiérete mucho. Descubrirás la belleza y la paz que hay en ti. Descubrirás, desde lo más profundo de tu ser, que hay nuevas elecciones en tu vida.. Y da un alegre mensaje de acción de gracias a tu creador por concederte el privilegio de existir. Gracias por reservar este momento de lectura para ti.